Acantilados de La Molata…lugar de reencuentro

Dicen que cada persona tiene un lugar al que necesita ir cada cierto tiempo, que son sitios especiales que ayudan reconectar con uno mismo y con lo que le rodea. A mí me pasa en un sitio del Parque Natural-Cabo de Gata, Los Acantilados de La Molata, creo que fue uno de los primeros lugares del Parque que un amigo nos enseñó hace casi 20 años, cuando aún se podía ir al Playazo de Rodalquilar sin preocuparse de donde dejar el coche o si iba a haber sitio en la playa, y para mi, una chica de interior, descubrir un paisaje con una belleza tan abrumadora me fascinó, y ahí quedó para siempre como un lugar al que volver.

Es cierto que la zona de los acantilados no es muy apropiada para ir con niños pequeños, pero el sendero que une esta zona con la Cala del Cuervo en Las Negras, si se toman las precauciones pertinentes se puede hacer con niños.

DSC_3719

El sendero tiene una longitud de unos 1,5 kilómetros que discurren entre el Playazo de Rodalquilar y la Cala del Cuervo en Las Negras.  Se puede dejar el coche en el Playazo y comenzamos la subida por el camino que va dirección a la batería de San Ramón, es una fortificación defensiva que ordenó construir Carlos III para defender la Costa de los ataques que llegaban por mar. Actualmente es de propiedad privada, algo que no me deja de fascinar, si te asomas por una de las ventanas (de lejos que hay que respetar la intimidad de sus habitantes) se puede ver una biblioteca con unas pitas disecadas decorativas preciosas, ¿Os imagináis una tarde de invierno sentado en un sillón de esa biblioteca leyendo un buen libro con una taza de té?.

 

Antes de la subida al castillo en la zona que está más próxima al agua nos podemos detener para hacer algo con lo que los niños alucinan, buscar fósiles,  se trata de una zona de arenisca que alberga una gran cantidad de restos fósiles de erizos y bivalvos que muestran su pasado marino.

El sendero está señalizado, así que seguiremos los hitos que nos van indicando el camino, el siguiente punto de interés es el mirador de la Molata, desde donde se pueden apreciar unas vistas espectaculares: a la derecha el Playazo de Rodalquilar, y a la Izquierda (a lo lejos) las moles de Mesa Roldán.

Si continuamos el sendero el siguiente tramo se estrecha bastante durante unos 300 metros, y aquí es donde hay que tener un especial cuidado con los niños, deberán ir por el interior y siempre siempre cogidos de la mano de un adulto, los adultos que vayan con los pequeños en mochila es recomendable que llevan siempre bastones para conseguir una mayor estabilidad y evitar tropiezos.

 

En el último tramo ya se llega a la  Cala del Cuervo, la bajada tiene cierta pendiente, por lo que habrá que ser especialmente precavidos.  Una vez llegados al final del sendero se puede aprovechar para  hacer un pic-nic, o también podemos irnos a las Negras a tomarnos un buen arroz negro en Las Barcas, a nosotros nos gusta especialmente este sitio, además de que la comida está muy rica, te permite comer tranquilamente mientras los peques juegan en la playa.

Este sendero también podéis hacerlo en el sentido inverso, es decir dejáis el coche en la Cala del Cuervo y llegaréis al Playazo, y si os ha sabido a poco (y además vais sin niños) podéis continuar hasta subir al Cerrico El Romeral y acercaros a la Cala Bergantín que aunque está llena de bolos y no es muy agradable para el baño, es uno de esos sitios con magia que hay que ir al menos una vez en la vida.

¿Os animais para estos atardeceres de verano?

@rmoratalla

#noolvidestucantimplora

¿Qué hacer con niños en Almería?

Más aventuras en el PARQUE NATURAL CABO DE GATA-NIJAR

Deja un comentario