Probablemente en alguna ocasión habréis oído hablar de Las Vias Verdes, para los que no sepáis lo que son os cuento que se trata de antiguas vías del tren en desuso que han sido recuperadas para acondicionarlas como itinerarios cicloturistas o senderistas.

En la Provincia de Almería contamos con aproximadamente 30 Kms de vías verdes, de los cuales 25 se corresponden con varios tramos de la Vía Verde del Almanzora y otros 5 kilómetros con la Vía Verde de Lucainena, que es la que hemos visitado recientemente con los peques.

Esta Vía Verde cuenta con 5 Kms habilitados y tiene su origen en el antiguo tren minero que llevaba el mineral desde Lucainena de las Torres hasta el cargadero de Agua Amarga.

Desde mi punto de vista resulta una excursión perfecta para hacer con los niños ya que se puede adaptar para todas las edades, al discurrir sobre trazados ferroviarios resulta accesible y con un fácil recorrido para diferentes medios de transporte no motorizados,

En nuestro caso íbamos tres familias con peques de diferentes edades y cada uno eligió un medio de transporte diferente, los niños mas grandecitos lo hicieron en bici (uno de ellos incluso con los ruedines) y los adultos andando con los bebés en la mochila.

Al llegar al pueblo a la derecha hay señalizada una zona de aparcamiento  desde la cual solo hay que cruzar la carretera para acceder a la Vía Verde (mucho cuidado al cruzar la carretera que aún no es el casco urbano del pueblo y los coches van rapidillo). Justo al principio de la Vía Verde está la antigua estación del tren que también ha sido rehabilitada y puesta en valor gracias al programa de las Vías Verdes. El centro sirve como punto de información turística,  cuenta con servicio de alquiler de bicicletas y además venden bebidas.

En la antigua estación comienza el recorrido que discurre por 5 Kilómetros y en los cuales se puede disfrutar de un agradable paseo, (aunque otra vez hay que estar atento a las señales puesto que en algunos puntos hay cruces con carreteras o caminos transitadas por coches), en el camino se pueden encontrara una serie de miradores y un área de descanso, donde podemos aprovechar para comernos los bocadillos de tortilla, o si se prefiere tomar un aperitivo y después comer en algunos de los bares o restaurantes que hay en el pueblo.

Si la excursión se hace con tiempo o se dispone de varios días, merece la pena visitar la Granja Escuela del Cortijo Los Baños, siempre y cuando los peques no hayan estado ya con el colegio (es visita obligada para los escolares almerienses 😉 )

Después de comer se puede completar la aventura visitando los antiguos hornos de calcinación, uno de ellos ha sido rehabilitado y se puede acceder a las pasarelas, aunque con niños muy pequeños yo no lo recomendaría porque puede resultar peligroso.

Esperamos poder visitar las demás vías verdes de la provincia y poder contaros nuevamente nuestras experiencias.

Si os animáis a hacer la rutilla podéis obtener toda la información en el siguiente enlace.

 http://www.viaverdelucainenadelastorres.org/´

http://www.viasverdes.com/itinerarios/itinerario.asp?id=21

@rmoratalla

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¿Qué hacer con niños en Almería?